sábado, 28 de julio de 2007

Conversaciones con Fromm


Escribe: M.E.R.
Tiempo de lectura: 10''

Escuchar bajito:


Papá, a quien de ahora en más llamaré Bernacho porque así le gustaba que le dijeran, fue un idealista innato que creía poder vivir de los lirios del campo y así, sobrevivir a la visión materialista de las cosas. A mamá, le dio dos recomendaciones: que jamás usemos sombreritos en verano y que asistiéramos a colegios públicos, y no privados de diversidad.
Bernacho estudió varias ingenierías (olvidándose recibirse en alguna); supo tener de compañera a la conocidísima G. A., a quien jamás dio la hora...¿o fue al revés?. Lo mágico en él, fue que nunca se aferró al pensamiento estructurado y también exploró otras áreas como la sociología y la psicología. Con el tiempo se convirtió en un ratón de biblioteca, podía pasar horas leyendo sin siquiera atender a los gemidos de su estómago.
Revisando entre sus cosas, encontré a Ética y Psicoanálisis, un libro de Erich Fromm que tiene sus años (fue publicado en 1957) aunque sus hojas se conservan intactas. A lo largo de Ética y Psicoanálisis, B. subraya, con delicadeza, las ideas más importantes y con el mismo lápiz amarillo, escribe breves acotaciones a los costados. En la página 92, del capítulo: La naturaleza humana y el carácter; Bernacho se anima a discutir con Fromm.
Aunque sólo se trate de una cuestión de camaradas, resulta oportuno transcribir la conversación. Para Fromm la orientación productiva incluye respuestas mentales, emocionales y sensoriales hacia otros, hacia uno mismo y hacia las cosas. El hombre es guiado por la razón.
A fin de evitar el equivoco a que conduce el término ‘productividad’-dice Fromm- juzgo apropiado analizar brevemente aquello que el término no significa. Generalmente la palabra ‘productividad’ se asocia a creatividad, particularmente a creatividad artística. El verdadero artista es, ciertamente, el más convincente representante de la productividad. Pero no todos los artistas son productivos.
Y continúa diciendo que la productividad es una actitud de la cual es capaz todo ser humano, a menos que esté mental o emocionalmente impedido. A lo que papá frunce el ceño y responde: “No estoy de acuerdo; la productividad, si es creativa, es emocional. Lo racional encierra los condicionamientos sociales”. Aunque el edipo tire, no puedo decir si estaba o no en lo cierto. Pero, posiblemente ellos se encuentren y continúen discutiendo sobre este aspecto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

bernacho fue y será el mejor